Mea Culpa
El Mea culpa es una frase latina
que se puede traducir literalmente como «por mi culpa» y es utilizada para
adjudicarse la responsabilidad de algún hecho o resultado negativo. El origen
de la expresión está en un segmento de una oración tradicional de la misa
católica conocida en latín como el Confiteor
(y traducida como el «yo confieso» o el «yo pecador»), en el cual la persona
reconoce sus pecados ante Dios.
Mas allá de los análisis
políticos respecto a los resultados del pasado 7 de octubre, es necesario hacer
un reconocimiento a los ciudadanos que voluntariamente manifestaron su opinión
con respecto al destino político social de nuestra patria, así como también una
revisión exhaustiva del porque del lado de la alternativa democrática no se cumplió
con la esperanza de millones de venezolanos
En estas elecciones
presidenciales se manifestó claramente la polarización existente en nuestro
país, sin embargo hay muchas cosas positivas y negativas que nos deja este
proceso, pero sobre todo un aprendizaje y una oportunidad trascendental para
reconocer nuestros errores como dirigentes políticos.
Una oportunidad para
expresar ese
mea culpa del Confiteor que se
ha transformado en el imaginario popular, ya que actualmente no es simplemente
una confesión de pecados, sino también una admisión de su naturaleza dañina y
la buena voluntad de hacer una compensación por ella. De esta manera hace falta
que cada uno de los que el pasado 7 de octubre ocupamos una posición de
responsabilidad por la transformación del destino de nuestro país, hagamos
reconocimiento de nuestras fallas
Erramos
al subestimar a nuestro adversario, no fuimos concretos al momento de convencer
a muchos chavistas descontentos, no pudimos capitalizar el contundente apoyo que
tienen nuestros gobernadores en Estados de suma importancia
Nos
falta reconocer mucho de este pasado inmediato y es momento de que por
compromiso y por la vocación social que nos convoca al trabajo diario, que
debemos pues, hacer un reconocimiento publico, para poder así seguir contando
con la credibilidad y el apoyo que es el bien mas preciado de cualquier
político.
Por
eso desde este espacio hago un reconocimiento de mea máxima culpa y reciban la
mayor disposición de este humilde servidor, para que hagamos todos los
correctivos necesarios para garantizar, que el próximo 16 de diciembre le
regalemos una alegría al pueblo
Venezolano.